• Cuando se trabaja con abrasivos reutilizables es fundamental limpiarlos antes de que vuelvan a ser proyectados.
  • Disponer siempre de abrasivo limpio y apto para volver a utilizarse asegura una calidad constante en el acabado de la pieza.
  • La limpieza del abrasivo aumenta el rendimiento, ya que si se elimina el polvo o restos de pintura hacemos que esas partículas no sean proyectadas de nuevo, evitando ensuciar la pieza y disminuir la efectividad, por no tratarse de partículas útiles con capacidad de realizar trabajo.

Los sistemas de limpieza se componen habitualmente de:

  • Sistema de limpieza en cascada
  • Tamices rotatorios
  • Filtro auxiliar

Existen además otras opciones de limpieza extra como separadores magnéticos, tamices vibrantes, etc…